Una rubia llamada Sonia Pellizzari hace videos XXX follando en la webcam y Argentina entera pierde la cabeza. Un bonito coño realmente y unas grandes tetas, pero no es la primera argenta que se mete una polla en la boca para ganarse la vida.
Sonia Pellizzari es una chica que era trabajadora pública y en sus muchos ratos libres hacia showcam. Era una webcamer a medio tiempo que redondeaba su (seguramente mediocre) sueldo follando en directo. Lo normal: una polla en el coño, hacer mamadas y dejar que se la metan por el culo.
Tiene buenas tetas y esta guapa, además bonita cola, por eso no entiendo como sus compañeros de trabajo en vez de invitarle mucho tragos, decidieron hacer que la despidieran. Eso habla muy mal de todos ustedes mis queridos amigos argentos. Deben revisar eso a ver que paso y crucificar a los responsables.
Porque si un país nos acostumbró a ser mente abierta con las mujeres que les gusta estar desnuda en Internet es ese. Todos saben que es Poringa, no hay que hacerse el tonto porque ya sabemos de qué va. Entonces no vengan ahora a decir que esta chica ha hecho algo malo.
Parte de mi mira con mucha decepción el hecho de ver como una mujer ya no puede cobrar por coger porque todo el mundo ya quiere apedrearla; pero la otra parte piensa que de no ser por el escándalo de la prensa, no la habríamos conocido.
No sé realmente si esto será algo común por alguna moda que no conozco y ya todas las mujeres con canales de webcam terminaran expuestas de esta forma. O simplemente fue un día de aburrimiento en la prensa de ese país y vamos… jodamos un poco a la colorada para ver qué pasa.
Lo que si nadie puede negar es que es lo mejor que le pudo pasar. Amor de parte de todos nosotros no le va a faltar y ahora, no solo tiene un hombre adulando su belleza con la esperanza que algún día decida dejarse coger por el baboso de Instagram, sino también muchos seguidores pajeros y muy fieles.
hola sonia eres un angelito caido del cielo exigiria que te devuelvan tu puesto de trabajo la vida privada de las personas no tienen porque influir en un puesto laboral